Pedaleando por la Vida 2021 | DÍA 4
DÍA 4: El martes fue un día muy lindo, vi manadas de guanacos y vicuñas jugando e, increíblemente, en el Abra del Acay, un zorro se acercó a mi bici. ¡Insólito! Salí de San Antonio de los Cobres y termine en Cachi, luego de pedalear 145 kilómetros y pasar por el Abra. El descenso fue duro, por el mal estado del camino, pero también fue mágico porque encontré amigos.
A 12 kilómetros, descendiendo del Abra, y a 4000 msnm, vive Flavia con su hija Damiana, a quien conozco desde hace más de 25 años. Ellas viven con sus animales y sin luz eléctrica, a orillas de donde nace el río Calchaquí. Siempre que puedo las visito, con mis grupos de ciclistas o solo. En una época le llevaba leche en polvo para su cachorro de llama preferido: “Pichón”. También colaboré con los hijos de Damiana, que es madre soltera, y hoy los encontré a todos ¡muy felices y alegres!
Desde el Abra a Cachi pedaleé a la par del Río Calchaquíes, un paisaje muy lindo, pasando por varios caserío de agricultores. Sobre la marcha descubrí que, con los pozos del camino y las vibraciones, se me rompió el trípode, lo que puede ser un gran problema. ¡Ya veremos como sigue todo! Hoy se me hizo largo, luego de pedalear 170 kilómetros, pero mañana te cuento!
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